Hoy toca hablar de nuevo en el idioma de los quesos sin lactosa. Este que os presento es el Gouda en lonchas de la marca Kaiku, y antes de que os hagáis ilusiones, diré que tiene el <0.01g de lactosa traicionero. Ahora sí, con toda la carne en el asador, continúo relatando mis impresiones.
Dos cosas le veo a este queso: una buena y una mala. La buena es que no me ha dado ningún problema a la hora de digerirlo, a pesar del pequeño porcentaje de lactosa. Eso sí, he procurado tomarlo siempre en muy pequeñas cantidades, no más de un par de lonchas al día.
La mala esta relacionada con el sabor. Hace mucho que no tomo queso Gouda del normal de toda la vida, pero lo recuerdo con un sabor mucho más intenso que el de estas lonchas. La verdad, el sabor me recordaba más un semicurado o al Havarti. Lo cual en absoluto me desagrada, pero esperaba que se diferenciara un poco más de este tipo de sabores que son los que solemos encontrar en los supermercados.
Como siempre os dejo la tabla de información nutricional. El queso es un alimento rico en grasas y proteínas y una manera ideal de incorporar calcio en nuestra dieta.
¡A disfrutar!
Tarta de cumpleaños sin lactosa
Hoy me ha tocado escribir la entrada número 100 de este blog, y se me ha ocurrido que podía hacer dos cosas, echar la vista atrás y celebrar.
Este pequeño proyecto, nació allá por Julio de 2014 como consecuencia de un verano sin nada que estudiar. Yo siempre había sido una estudiante de sobresaliente, que se dedicaba a pasar los meses de vacaciones mitad tostándose al sol y mitad debajo del agua. Pero las matemáticas y la física de una carrera de Ingeniería no tienen nada que ver con las de secundaria y bachillerato y se me resistieron un poco más. Así que me tocó cambiar la sombrilla por los libros, y la toalla por una mesa de madera. Y parece que le cogí gusto, porque me tocó repetir la jugada durante cuatro largos veranos más. Pero el año pasado, algo haría diferente, que terminé con todo aprobado y todo el tiempo del mundo para hacer lo que se me antojara.
Siempre he ha gustado escribir, y me empecé a interesar por la cocina y la repostería, así que se me ocurrió juntar esas dos pasiones, y condimentar la mezcla con mi intolerancia a la lactosa. Y VOILÀ, surgió #BuenosDíasCoAlegría. Desde entonces miles de personas de todo el mundo han pasado por aquí, y espero que lo que hayan visto les haya servido, porque ayudar, aunque sea un poquito, siempre ha sido el principal objetivo de este blog.
En este tiempo las tres entradas más visitadas son:
1. Gratinar sin Queso
2. Galletas sin Lactosa
3. Meriendas sin Lactosa para todos los gustos
Y los países que más atentos están:
1. España
2. Estados Unidos
3. Francia
Infinitas gracias a todos, de verdad, desde el corazón.
Y ahora, lo que muchos estaríais esperando, la celebración. Se me ha ocurrido que una vez al mes, podría hablaros de algún establecimiento, ya sea bar, cafetería, restaurante o pastelería, que haya descubierto y que por supuesto tenga alguna facilidad, o un especial cuidado con aquellos que tienen problemas con la lactosa.
Porque me toca de cerca y porque llevo muchos años disfrutando de sus tartas y pasteles, es de justicia inaugurar la sección con el Obrador de Pastelería Alcocrem. Está en Mairena del Alcor y es un "Obrador artesano de tartas, pasteles y helados, con venta directa y distribución propia a hostelería y comercios". Los que estéis en la provincia, no perdáis la oportunidad de acercaros y especialmente para los que no tomamos leche os recomiendo el tocino de cielo.
Mi familia lleva muchos años encargando allí las tartas de cumpleaños, y parece que este año el hecho de tener que hacerla sin lactosa, no supuso ningún problema.
No miento si digo que nunca me había sabido tan buena una tarta. Y no sólo a mí, tengo amigos que nunca toman tarta en los cumpleaños y esta les encantó. Siento no tener ningún corte que mostraros, pero es una especie de Tarta San Marcos, con capas de bizcocho y crema intercaladas, por los laterales está decorada con frutos secos, y la parte de arriba es de yema tostada.
Pedir un deseo y soplar las velas, cuantas veces queráis.
¡A disfrutar!
Este pequeño proyecto, nació allá por Julio de 2014 como consecuencia de un verano sin nada que estudiar. Yo siempre había sido una estudiante de sobresaliente, que se dedicaba a pasar los meses de vacaciones mitad tostándose al sol y mitad debajo del agua. Pero las matemáticas y la física de una carrera de Ingeniería no tienen nada que ver con las de secundaria y bachillerato y se me resistieron un poco más. Así que me tocó cambiar la sombrilla por los libros, y la toalla por una mesa de madera. Y parece que le cogí gusto, porque me tocó repetir la jugada durante cuatro largos veranos más. Pero el año pasado, algo haría diferente, que terminé con todo aprobado y todo el tiempo del mundo para hacer lo que se me antojara.
Siempre he ha gustado escribir, y me empecé a interesar por la cocina y la repostería, así que se me ocurrió juntar esas dos pasiones, y condimentar la mezcla con mi intolerancia a la lactosa. Y VOILÀ, surgió #BuenosDíasCoAlegría. Desde entonces miles de personas de todo el mundo han pasado por aquí, y espero que lo que hayan visto les haya servido, porque ayudar, aunque sea un poquito, siempre ha sido el principal objetivo de este blog.
En este tiempo las tres entradas más visitadas son:
1. Gratinar sin Queso
2. Galletas sin Lactosa
3. Meriendas sin Lactosa para todos los gustos
Y los países que más atentos están:
1. España
2. Estados Unidos
3. Francia
Infinitas gracias a todos, de verdad, desde el corazón.
Y ahora, lo que muchos estaríais esperando, la celebración. Se me ha ocurrido que una vez al mes, podría hablaros de algún establecimiento, ya sea bar, cafetería, restaurante o pastelería, que haya descubierto y que por supuesto tenga alguna facilidad, o un especial cuidado con aquellos que tienen problemas con la lactosa.
Porque me toca de cerca y porque llevo muchos años disfrutando de sus tartas y pasteles, es de justicia inaugurar la sección con el Obrador de Pastelería Alcocrem. Está en Mairena del Alcor y es un "Obrador artesano de tartas, pasteles y helados, con venta directa y distribución propia a hostelería y comercios". Los que estéis en la provincia, no perdáis la oportunidad de acercaros y especialmente para los que no tomamos leche os recomiendo el tocino de cielo.
Mi familia lleva muchos años encargando allí las tartas de cumpleaños, y parece que este año el hecho de tener que hacerla sin lactosa, no supuso ningún problema.
No miento si digo que nunca me había sabido tan buena una tarta. Y no sólo a mí, tengo amigos que nunca toman tarta en los cumpleaños y esta les encantó. Siento no tener ningún corte que mostraros, pero es una especie de Tarta San Marcos, con capas de bizcocho y crema intercaladas, por los laterales está decorada con frutos secos, y la parte de arriba es de yema tostada.
Pedir un deseo y soplar las velas, cuantas veces queráis.
¡A disfrutar!
Postres sin lactosa Dhul: Arroz con leche
Hoy os traigo el primer capítulo de Postres sin lactosa Dhul y sin duda mi preferido: el Arroz con leche. Todos los postres de esta gama son además sin gluten y sin soja.
"El sabor de siempre, más digestivo". En muchos casos lo que prometen ciertos productos, no puede estar más lejos de la realidad, pero por suerte no es el caso. En lo que a sabor respecta no tiene nada que envidiarle a otros arroces con leche envasados, aunque, en mi opinión, ninguno consigue el verdadero sabor del Arroz casero. No sabe mucho a canela pero está muy dulce. Otros puntos a favor son la cremosidad y el punto del arroz, ambos de 10.
Como muchos otros productos sin lactosa, tienen ese <0,01 con el que hay que tener cuidado, pero a mí personalmente no me ha dado ningún problema. Como siempre os dejo la información de ingredientes y la tabla de información nutricional por si queréis echarles un vistazo.
¡A disfrutar!
"El sabor de siempre, más digestivo". En muchos casos lo que prometen ciertos productos, no puede estar más lejos de la realidad, pero por suerte no es el caso. En lo que a sabor respecta no tiene nada que envidiarle a otros arroces con leche envasados, aunque, en mi opinión, ninguno consigue el verdadero sabor del Arroz casero. No sabe mucho a canela pero está muy dulce. Otros puntos a favor son la cremosidad y el punto del arroz, ambos de 10.
Como muchos otros productos sin lactosa, tienen ese <0,01 con el que hay que tener cuidado, pero a mí personalmente no me ha dado ningún problema. Como siempre os dejo la información de ingredientes y la tabla de información nutricional por si queréis echarles un vistazo.
¡A disfrutar!
Merienda sin lactosa
Hoy os traigo la segunda entrega de Meriendas sin lactosa para todos los gustos, con cuatro opciones sencillas e ideales para llenar las eternas horas entre el almuerzo y la cena.
1. Sandwich de manzana
Para ello únicamente necesitaremos una manzana de tamaño medio y un poco de crema de almendras. Si no la encontráis, podéis usar, mantequilla de cacahuete o miel.
Preparación: Descorazonamos la manzana y la cortamos en rodajas de aproximadamente 1cm de grosor. Emparejamos cada rodaja con una que sea de similar tamaño, untamos una de las dos con crema de almendras y colocamos la otra encima.
2. Tostas de queso y mermelada.
Necesitaremos un par de rebanada de pan tostado, yo uso el de Ortiz integral sin sal, queso de untar sin lactosa y mermelada del sabor que más os guste.
Creo que la preparación es fácilmente deducible, no hay más que untar queso y después mermelada. Podéis sustituir la mermelada, por algún tipo de Jamon York o Pavo, si no sois muy de dulce. El aguacate y la carne de membrillo también son ingredientes que complementan muy bien al queso crema.
El queso que he usado es de la marca Arla y podéis encontrarlo en supermercados Eroski.
3. Fresas con Yogur
Esta quizás sea una de mis meriendas favoritas y sin duda una de las más sanas. Necesitaremos un yogur sin lactosa y un puñado de fresas.
Lo ideal quizá sería cortar las fresas en trocitos, ponerlas en un cuenco junto con el yogur y mover para que se integren. Pero yo suelo quitarles las hojas, partirlas a la mitad, y sumergirlas directamente en el vaso del yogur, asegurándome de que están cubiertas de arriba a abajo.
4. Pastel de Plátano
Estas es la opción perfecta para los más golosos, porque sin dejar de ser sana, es la más dulce. Necesitaremos un plátano (cuanto más maduro mejor), un par de chucharadas de cacao en polvo/Nesquik y un huevo.
Preparación: en un cuenco batimos el huevo. Añadimos las dos cucharadas de caco y cuando esté integrado, añadimos el plátano, que previamente habremos machacado con un tenedor. Si el plátano no está maduro, será más complicado machacarlo. Introducimos el cuenco con la mezcla en el microondas durante tres minutos y dejamos reposar al menos 20 minutos antes de comer.
El sabor a plátano es muy intenso, y en mi opinión es muy agradable encontrarse trocitos en cada bocado.
¡A disfrutar!
1. Sandwich de manzana
Para ello únicamente necesitaremos una manzana de tamaño medio y un poco de crema de almendras. Si no la encontráis, podéis usar, mantequilla de cacahuete o miel.
Preparación: Descorazonamos la manzana y la cortamos en rodajas de aproximadamente 1cm de grosor. Emparejamos cada rodaja con una que sea de similar tamaño, untamos una de las dos con crema de almendras y colocamos la otra encima.
2. Tostas de queso y mermelada.
Necesitaremos un par de rebanada de pan tostado, yo uso el de Ortiz integral sin sal, queso de untar sin lactosa y mermelada del sabor que más os guste.
Creo que la preparación es fácilmente deducible, no hay más que untar queso y después mermelada. Podéis sustituir la mermelada, por algún tipo de Jamon York o Pavo, si no sois muy de dulce. El aguacate y la carne de membrillo también son ingredientes que complementan muy bien al queso crema.
El queso que he usado es de la marca Arla y podéis encontrarlo en supermercados Eroski.
3. Fresas con Yogur
Esta quizás sea una de mis meriendas favoritas y sin duda una de las más sanas. Necesitaremos un yogur sin lactosa y un puñado de fresas.
Lo ideal quizá sería cortar las fresas en trocitos, ponerlas en un cuenco junto con el yogur y mover para que se integren. Pero yo suelo quitarles las hojas, partirlas a la mitad, y sumergirlas directamente en el vaso del yogur, asegurándome de que están cubiertas de arriba a abajo.
4. Pastel de Plátano
Estas es la opción perfecta para los más golosos, porque sin dejar de ser sana, es la más dulce. Necesitaremos un plátano (cuanto más maduro mejor), un par de chucharadas de cacao en polvo/Nesquik y un huevo.
Preparación: en un cuenco batimos el huevo. Añadimos las dos cucharadas de caco y cuando esté integrado, añadimos el plátano, que previamente habremos machacado con un tenedor. Si el plátano no está maduro, será más complicado machacarlo. Introducimos el cuenco con la mezcla en el microondas durante tres minutos y dejamos reposar al menos 20 minutos antes de comer.
El sabor a plátano es muy intenso, y en mi opinión es muy agradable encontrarse trocitos en cada bocado.
¡A disfrutar!
"Oreos" sin lactosa
Hoy os quiero presentar las Galletas al Cacao de Gerblé, que para que nos entendamos, son el perfecto sustituto, o quizá incluso su versión mejorada, de las galletas Oreo de toda la vida.Creo que si me las dieran a probar con los ojos vendados sería incapaz de distinguirlas.
Tienen un sabor intenso a cacao, y la crema es suave y generosa, del mismo grosor caso de las galletas entre las que se encuentra. Una única pega les encuentro, que en el paquete sólo vienen ocho galletas, y todas piden a gritos ser comidas de una sentada.
Como se puede apreciar en los ingredientes, no aparece ninguno que esté relacionado con la leche o alguno de sus componentes. Suele ser muy común entre los productos sin gluten el evitar también la leche o el huevo, así que os recomiendo que os detengáis en las secciones de alimentación especial, de los supermercados, dedicada a este tipo de productos, porque se encuentran perlitas como esta.
Espero que os animéis a probarlas. Yo las he encontrado en Carrefour.
¡A disfrutar!
Tienen un sabor intenso a cacao, y la crema es suave y generosa, del mismo grosor caso de las galletas entre las que se encuentra. Una única pega les encuentro, que en el paquete sólo vienen ocho galletas, y todas piden a gritos ser comidas de una sentada.
Como se puede apreciar en los ingredientes, no aparece ninguno que esté relacionado con la leche o alguno de sus componentes. Suele ser muy común entre los productos sin gluten el evitar también la leche o el huevo, así que os recomiendo que os detengáis en las secciones de alimentación especial, de los supermercados, dedicada a este tipo de productos, porque se encuentran perlitas como esta.
Espero que os animéis a probarlas. Yo las he encontrado en Carrefour.
¡A disfrutar!
Batidos de frutas sin lactosa (Smoothies)
En la pelea anual entre el invierno y la primavera, parece que es ella la que últimamente está levantando más la voz. Y con la llegada del buen tiempo nos apetece decir adiós a todas esas bebidas calentitas que nos servían de escudo contra el frío, y decir Aloha a todo lo que sea sano y refrescante.Por eso os traigo tres opciones de Smoothies o Batidos de frutas sin lactosa perfectos para tomar como merienda o a media mañana.
Plátano y Chocolate
Necesitaremos: un par de plátanos pequeños o uno grande, un vaso de leche de almendras y una cucharada de cacao puro.
El proceso siempre es el mismo, ponemos todos los ingredientes en el baso de la batidora, batimos, servimos y disfrutamos.
Para los que no sean amantes del sabor amargo del cacao puro, podéis echarle un par de cucharadas de chocolate a la taza o Nesquik. Podéis añadir también un par de cucharaditas de azúcar si os gusta más dulce, pero para mi gusto, la dulzura de la fruta es suficiente.
Es un batido denso que gracias al plátano nos aporta potasio, magnesio, vitamina C y fibra. Además debido a su consistencia, es imposible tomarlo de una sentada, lo que mantendrá a raya el apetito durante un periodo de tiempo más largo.
Manzana y Canela
Necesitaremos: Una manzana, una cucharadita de canela, un vaso de leche de almendras y opcional, una cucharada y media de crema de almendras, para potenciar el sabor de la leche y endulzar.
Los pasos a seguir son los mismo que en el batido anterior, cortamos la manzana, a mí me gusta incorporarla con piel, pero podéis pelarla primero si lo preferís, añadimos el resto de ingredientes, batimos y servimos.
Es es el más grumoso de los tres, porque quedan pequeños trocitos de manzana sin triturar.
La manzana es conocida por sus porpiedades antioxidantes y es una gran fuente de fibra. Además la crema de almendra es un alimento rico en vitamina E.
Fresa y frutos del bosque
Necesitaremos: un puñado de fresas, un yogur sin lactosa y un chorrito de leche, si vemos que se queda muy denso.
En mi caso he usado, un yogur de frutos del bosque, desnatado de la marca Kaiku, para aportar otro sabor que potencie el de la fresa, pero se puede usar también yogur azucarado o de cualquier sabor que os guste.
Si no sois muy amantes de los sabores ácidos, podéis añadir azúcar para bajar un poco la intensidad del sabor de la fresa.
La fresa es un fruta con propiedades depurativas, con un alto contenido en vitamina C.
Más o menos todos los batidos rondan las 200-250 kcal, y solo contienen los azúcares presentes en la fruta y el azúcar añadido que lleva la leche, lo que los convierte en opciones sanas y saludables.
Por mi parte es todo. Feliz semana y ¡a disfrutar!
Plátano y Chocolate
Necesitaremos: un par de plátanos pequeños o uno grande, un vaso de leche de almendras y una cucharada de cacao puro.
El proceso siempre es el mismo, ponemos todos los ingredientes en el baso de la batidora, batimos, servimos y disfrutamos.
Para los que no sean amantes del sabor amargo del cacao puro, podéis echarle un par de cucharadas de chocolate a la taza o Nesquik. Podéis añadir también un par de cucharaditas de azúcar si os gusta más dulce, pero para mi gusto, la dulzura de la fruta es suficiente.
Es un batido denso que gracias al plátano nos aporta potasio, magnesio, vitamina C y fibra. Además debido a su consistencia, es imposible tomarlo de una sentada, lo que mantendrá a raya el apetito durante un periodo de tiempo más largo.
Manzana y Canela
Necesitaremos: Una manzana, una cucharadita de canela, un vaso de leche de almendras y opcional, una cucharada y media de crema de almendras, para potenciar el sabor de la leche y endulzar.
Los pasos a seguir son los mismo que en el batido anterior, cortamos la manzana, a mí me gusta incorporarla con piel, pero podéis pelarla primero si lo preferís, añadimos el resto de ingredientes, batimos y servimos.
Es es el más grumoso de los tres, porque quedan pequeños trocitos de manzana sin triturar.
La manzana es conocida por sus porpiedades antioxidantes y es una gran fuente de fibra. Además la crema de almendra es un alimento rico en vitamina E.
Fresa y frutos del bosque
Necesitaremos: un puñado de fresas, un yogur sin lactosa y un chorrito de leche, si vemos que se queda muy denso.
En mi caso he usado, un yogur de frutos del bosque, desnatado de la marca Kaiku, para aportar otro sabor que potencie el de la fresa, pero se puede usar también yogur azucarado o de cualquier sabor que os guste.
Si no sois muy amantes de los sabores ácidos, podéis añadir azúcar para bajar un poco la intensidad del sabor de la fresa.
La fresa es un fruta con propiedades depurativas, con un alto contenido en vitamina C.
Más o menos todos los batidos rondan las 200-250 kcal, y solo contienen los azúcares presentes en la fruta y el azúcar añadido que lleva la leche, lo que los convierte en opciones sanas y saludables.
Por mi parte es todo. Feliz semana y ¡a disfrutar!
Jamón York & Pavo sin lactosa #2
Hoy os traigo otra parejita de Jamón&Pavo de las que podemos comer sin problemas, son de la gama Finissimas de Campofrío.
Como todas las veces que me ha tocado hablar de este tipo de productos, no se muy bien que decir. Tanto el sabor como la textura, no decepcionan pero por otro lado no son de los que sorprenden y se quedan en el paladar. En definitiva no tienen nada que los haga destacar sobre otros de su clase, pero cumplen con las expectativas. Yo personalmente suelo tomarlas con un poco de queso fresco sin lactosa y pan tostado. El perfecto desayuno.
Como siempre os dejo la información nutricional. Algo a destacar es que llevan el sello de Adilac, (Asociación de intolerantes a la lactosa) lo cual es siempre una garantía de no-problemas.
¡A disfrutar!
Como todas las veces que me ha tocado hablar de este tipo de productos, no se muy bien que decir. Tanto el sabor como la textura, no decepcionan pero por otro lado no son de los que sorprenden y se quedan en el paladar. En definitiva no tienen nada que los haga destacar sobre otros de su clase, pero cumplen con las expectativas. Yo personalmente suelo tomarlas con un poco de queso fresco sin lactosa y pan tostado. El perfecto desayuno.
Como siempre os dejo la información nutricional. Algo a destacar es que llevan el sello de Adilac, (Asociación de intolerantes a la lactosa) lo cual es siempre una garantía de no-problemas.
¡A disfrutar!
Natilla de chocolate sin lactosa (casera)
Hoy quiero compartir con vosotros mi manera de hacer natillas de chocolate. Es un postre muy socorrido, porque se hace literalmente en menos de diez minutos, y es de los que podéis dejar preparados con mucha antelación, porque cuanto más lo refrigeremos mejor. Además es sencillísimo de hacer y está para chuparse los dedos.
Ingredientes
La ralladura de naranja y las almendras son totalmente opcionales, las he añadido para crear contrastes interesantes en el sabor y en la textura. Si en vez de usar Stevia, queréis añadir azúcar de caña, la cantidad son unos 25 gramos aproximadamente.
Proceso
1. Mezclamos todos los ingredientes, menos los frutos secos, en un recipiente apto para microondas, e integramos con unas varillas. Hay que tener cuidado de que no queden grumos de cacao, porque se queman muy fácilmente, y le dan un sabor desagradable a la natilla.
2. Introducimos en el microondas durante 3 minutos a máxima potencia. Sacamos, mezclamos porque habrá partes que empezaran a solidificar y volvemos a introducir en el microondas, esta vez, durante 2 minutos. Al sacarla, veremos que la parte de arriba estará líquida aún, y la de abajo tendrá una consistencia grumosa. Movemos para integrarlas bien, hasta que todo espese.
3. Repartimos en cuencos y decoramos con unos frutos secos, que previamente habremos troceado. Yo usé almendras, porque son las preferidas de mi madre, pero realmente las nueces le van mucho más.
4. Dejamos que se enfríen un poco, y los metemos en el frigorífico al menos un par de horas más. Lo único que queda por hacer es disfrutar de estas riquísimas natillas. .
Os recomiendo que no pongáis mucha cantidad en los cuencos, porque la intensidad de los sabores, hace que saturen pronto.
¡Que aproveche!
Ingredientes
La ralladura de naranja y las almendras son totalmente opcionales, las he añadido para crear contrastes interesantes en el sabor y en la textura. Si en vez de usar Stevia, queréis añadir azúcar de caña, la cantidad son unos 25 gramos aproximadamente.
Proceso
1. Mezclamos todos los ingredientes, menos los frutos secos, en un recipiente apto para microondas, e integramos con unas varillas. Hay que tener cuidado de que no queden grumos de cacao, porque se queman muy fácilmente, y le dan un sabor desagradable a la natilla.
2. Introducimos en el microondas durante 3 minutos a máxima potencia. Sacamos, mezclamos porque habrá partes que empezaran a solidificar y volvemos a introducir en el microondas, esta vez, durante 2 minutos. Al sacarla, veremos que la parte de arriba estará líquida aún, y la de abajo tendrá una consistencia grumosa. Movemos para integrarlas bien, hasta que todo espese.
3. Repartimos en cuencos y decoramos con unos frutos secos, que previamente habremos troceado. Yo usé almendras, porque son las preferidas de mi madre, pero realmente las nueces le van mucho más.
4. Dejamos que se enfríen un poco, y los metemos en el frigorífico al menos un par de horas más. Lo único que queda por hacer es disfrutar de estas riquísimas natillas. .
Os recomiendo que no pongáis mucha cantidad en los cuencos, porque la intensidad de los sabores, hace que saturen pronto.
¡Que aproveche!
Dulces especiales para días especiales: Torrijas
Hoy toca hablar de la torrija, el dulce por excelencia de Cuaresma y Semana Santa, en gran parte de España. Según he leído, su origen se remonta al siglo XV, y fueron las monjas quienes las inventaron. Se preparaban con el pan sobrante, para compensar el ayuno de carne impuesto en Cuaresma.
Existen dos variantes de este rico dulce: torrijas de vino y torrijas de leche. Estas últimas son las más comunes, pero por desgracia las que tenemos que evitar. Por suerte las de vino están igual de ricas y en principio podemos comerlas sin problema. Como siempre, ante la duda recomiendo que preguntéis, porque mejor prevenir que curar, porque a veces aunque sean de vino se pasan por leche para ablandar el pan.
La receta puede parecer simple, a pesar de sus múltiples variantes, pero conseguir unas torrijas jugosas y esponjosas no es tarea sencilla. En mi casa, desde que yo tengo memoria es mi abuela la que se encarga de surtirnos todos los años, con una docena de torrijas. Este año le han salido especialmente buenas y no podía menos que compartirlas con vosotros.
Ella no es mucho de respetar cantidades o prodedimientos, y prefiere hacerlas "al calculo", como ella dice, así que detallar la receta es un poco complicado. Pero los pasos a seguir son:
1. Pasar las torrijas por el vino rebajado con algo de agua. Hay que dejar que se empapen pero que no se empapochen.
2. Pasarlas por el huevo y freírlas en una sartén con aceite de oliva, hasta que estén doradas por ambos lados.
3. Para terminar hay que pasarlas por una almíbar hecho con miel y canela.
Dos cosas hay que tener en cuenta a la hora de hacerlas/degustarlas, tanto si son de vino como de lehce, hay que asegurarse de que el pan no lleva nada de lactosa. Cuando el pan es de panadería no hay problema, pero si usáis pan de molde, revisar los ingredientes. Y la segunda es que no hay que privarse de las torrijas de leche, se puede usar leche sin lactosa, o alguna variante de leche vegetal.
¡A disfrutar!
Si queréis saber más de las torrijas podéis pinchar aquí.
Existen dos variantes de este rico dulce: torrijas de vino y torrijas de leche. Estas últimas son las más comunes, pero por desgracia las que tenemos que evitar. Por suerte las de vino están igual de ricas y en principio podemos comerlas sin problema. Como siempre, ante la duda recomiendo que preguntéis, porque mejor prevenir que curar, porque a veces aunque sean de vino se pasan por leche para ablandar el pan.
La receta puede parecer simple, a pesar de sus múltiples variantes, pero conseguir unas torrijas jugosas y esponjosas no es tarea sencilla. En mi casa, desde que yo tengo memoria es mi abuela la que se encarga de surtirnos todos los años, con una docena de torrijas. Este año le han salido especialmente buenas y no podía menos que compartirlas con vosotros.
Ella no es mucho de respetar cantidades o prodedimientos, y prefiere hacerlas "al calculo", como ella dice, así que detallar la receta es un poco complicado. Pero los pasos a seguir son:
1. Pasar las torrijas por el vino rebajado con algo de agua. Hay que dejar que se empapen pero que no se empapochen.
2. Pasarlas por el huevo y freírlas en una sartén con aceite de oliva, hasta que estén doradas por ambos lados.
3. Para terminar hay que pasarlas por una almíbar hecho con miel y canela.
Dos cosas hay que tener en cuenta a la hora de hacerlas/degustarlas, tanto si son de vino como de lehce, hay que asegurarse de que el pan no lleva nada de lactosa. Cuando el pan es de panadería no hay problema, pero si usáis pan de molde, revisar los ingredientes. Y la segunda es que no hay que privarse de las torrijas de leche, se puede usar leche sin lactosa, o alguna variante de leche vegetal.
¡A disfrutar!
Si queréis saber más de las torrijas podéis pinchar aquí.
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